Umbral del Conticinio

En este momento, soy un río. Un río con rápidos, que cesan contra grandes rocas. Mucho movimiento, que sigue su curso, mas no se libera. Así son mis pensamientos. Son demasiados; surgen al mismo tiempo, algunos se unen, y aquí se quedan. Siguen circulando como corriente, pero no llegan al vacío. No hay liberación, no hay resolución, simplemente siguen impactando.

¿Por qué en un mundo tan complejo, hay espacio para el odio? ¿No están suficiente mal las cosas, como para sumarle división?  Siempre habrá opiniones diferentes, habrá situaciones donde estar en el "lado" correcto sea relativo y cuestión de perspectivas, como habrá casos donde quizá solo haya un camino adecuado.  Pero, antes que nada ¿nos fijamos en ambos lados de la moneda?  ¿Vemos más allá de lo que no nos parece, de lo que incomoda? ¿Estamos pensando en las personas que sí están involucradas?  ¿A caso solo hablaremos de lo que no nos parece importante y que por lo tanto, no nos pesa?  ¿Nos fijamos en lo que si nos interesa y vemos de igual manera lo malo?  Porque tristemente para todo, hay un problema.  Tenemos mucho que trabajar, pero en todos los aspectos. No solo en lo que no nos parece importante, cuando para otros es parte de su vida, e incluso, parte de su solvento.  El mundo es complicado. A veces no te puedes echar para atrás.  Per...

Somo agua, agua de mar. A veces serenos, corriente tranquila. En ocasiones agitados, como las olas. Pero siempre en movimiento.  Movimiento que nos hace renacer y apreciar al final del día, lo bello de nuestro ser.

Ligera luz, que en las noches de manera sútil te presentas, delicadamente evocas tranquilidad y esperanza. La estructura que te permite entrar es discreta, es adecuada y es suficiente para llenar mi espacio. Eres el vano que me llena de consuelo, que me acompaña en la melancolía, y que me calma, cuando por las noches no puedo dormir.

Más que versiones de una "historia", hay realidades.  Realidades que dependen de las experiencias de cada individuo y de factores que pueden afectar la vulnerabilidad de nuestros sentires.  Reprochar o quejarse de la otra parte, sin conocer motivos o razones ¿no es una manera de invalidar los sentires de este? Hay acciones que pueden ser correctas, como también lo pueden ser incorrectas. Hay perspectivas diferentes sobre cada una.  Y, ¿la clave a todo esto? Es la comunicación. Solo la comunicación hace de dos realidades, una.

Somos lo que somos; por los lugares, por las personas, por las experiencias.  A veces actuamos diferente, a veces parecemos otros. Nuestra esencia y personalidad tienen matices. Matices que equilibran nuestros aprendizajes.  Hay que abrazar nuestro lado oscuro, como a nuestro lado blando. Admirar los matices de nuestro ser, como los del atardecer.